La CPSC considera a Amazon responsable, según la ley federal de seguridad, de productos peligrosos vendidos por vendedores externos en Amazon.com
La Comisión de Seguridad de Productos de Consumo (CPSC por sus siglas en inglés) de EE. UU., emitió el 30 de julio de 2024, una Decisión y Orden contra Amazon.com, Inc., una empresa global de comercio electrónico con $575 mil millones en ingresos. A través de una votación unánime, la Comisión determinó que Amazon era un “distribuidor” de productos defectuosos o que no cumplían con los estándares federales de seguridad de productos de consumo y, por lo tanto, tiene la responsabilidad legal de retirarlos del mercado en su plataforma.
Más de 400.000 productos están sujetos a esta orden: específicamente, detectores de monóxido de carbono (CO) defectuosos, secadores de pelo sin protección contra electrocución y ropa de dormir para niños que violan las normas federales de inflamabilidad.
La Comisión determinó que estos productos, listados en Amazon.com y vendidos por vendedores externos utilizando el programa Cumplido por Amazon, representan un "peligro sustancial para el producto" según la Ley de Seguridad de Productos de Consumo (CPSA por sus siglas en inglés). Adicionalmente, se argumenta que Amazon no notificó al público sobre estos productos peligrosos y no tomó las medidas adecuadas para invitar a sus clientes a devolverlos o destruirlos, dejando así a los consumidores en un riesgo sustancial de sufrir lesiones. Amazon, por su parte, indicó ante un Juez de Derecho Administrativo (ALJ) y la Comisión, que no era un distribuidor y no asumía ninguna responsabilidad por la seguridad de los productos vendidos bajo su programa Cumplido por Amazon.
Según la Decisión y Orden de la Comisión, Amazon debe presentar planes propuestos para notificar a los consumidores y al público sobre los productos peligrosos, y retirar los productos del comercio, incentivando su devolución o destrucción.
Mirada general
El 14 de julio de 2021, la Comisión autorizó una denuncia administrativa contra Amazon alegando que la empresa distribuía ciertos productos catalogados como un peligro sustancial. El asunto se juzgó inicialmente ante un juez administrativo que dictaminó que Amazon era un “distribuidor”, que los productos presentan un peligro sustancial y que Amazon debe tomar ciertas medidas, incluida la emisión de retiros del mercado, para proteger al público de los productos peligrosos. Ambas partes apelaron el fallo del ALJ ante la Comisión, la cual, consideró el expediente del caso y escuchó los argumentos orales, lo que resultó en esta Decisión y Orden.
Según la CPSA, después de que la Comisión escucha la evidencia de las partes y determina que un producto presenta un peligro sustancial, puede exigir que un fabricante, distribuidor o minorista del producto advierta a los consumidores sobre los riesgos del producto y proporcione soluciones para retirarlos del mercado o de los hogares de los consumidores.
Cuando vendedores externos venden productos peligrosos a través de la plataforma o los servicios de un distribuidor, la Comisión puede responsabilizar al distribuidor de proporcionar estas soluciones a los consumidores.
En este caso, los vendedores externos pusieron a la venta los productos peligrosos en Amazon.com, como parte del programa Cumplido por Amazon. Además de permitir a vendedores externos publicar productos en el sitio web Amazon.com, este programa proporciona una variedad de servicios a sus vendedores participantes.
Durante el procedimiento de derecho administrativo ante el juez administrativo y la Comisión, Amazon no cuestionó que los productos presentan un peligro sustancial. En cambio, Amazon argumentó que no actuaba como distribuidor de productos peligrosos en el sentido de la CPSA y, por lo tanto, no era responsable de tomar medidas para proteger al público. El Juez de Derecho Administrativo (ALJ) rechazó el argumento de Amazon, sosteniendo que Amazon actuó como distribuidor en este asunto. La Comisión afirmó que se mantiene en la decisión de hoy.
Amazon también afirmó que enviar mensajes a los compradores iniciales sobre problemas de seguridad “potenciales” y proporcionarles créditos de Amazon.com –en lugar de reembolsos que incentivaran la devolución o destrucción del producto– eran suficientes para remediar los peligros del producto. La Comisión, así como el juez administrativo, no estuvieron de acuerdo y consideraron que las acciones de Amazon eran inadecuadas para proteger al público.
La empresa trasnacional, ahora debe desarrollar y presentar planes propuestos para notificar a los compradores y al público sobre los peligros de los productos y proporcionar reembolsos o reemplazos para estos productos. El aviso al público es importante para que las personas que hayan recibido uno de los productos como regalo o lo hayan comprado de segunda mano, puedan conocer los peligros. La Comisión considerará estos planes y luego emitirá una segunda orden sobre notificación y soluciones.