En este artículo, expongo los puntos clave que le permitirán aumentar la calidad y la eficiencia de sus proyectos, con recubrimientos intumescentes para la protección contra incendios de acero aplicados en un entorno controlado fuera del sitio.
Trasladar las aplicaciones de revestimiento de acero a una instalación fuera del sitio ofrece ventajas clave, en particular para los revestimientos ignífugos. El desempeño óptimo de estos recubrimientos para retardar la transferencia de calor durante los incendios y mitigar la corrosión requiere una aplicación adecuada, y las instalaciones externas brindan el más alto nivel de control en este sentido, sin mencionar la estética. Esto se debe a la ausencia de varios factores y condiciones que pueden afectar la aplicación en los sitios de construcción, lo que hace que los entornos fuera del sitio sean un lugar ideal para garantizar el mejor rendimiento de los recubrimientos y la mejor calidad de acabado. Adicionalmente, en el sitio de construcción, el acero estructural ignífugo recubierto, que llega listo para ensamblar, puede mejorar significativamente la calidad, el costo, la duración, la programación, la eficiencia y la seguridad del proyecto.
Ahora bien, entregar los revestimientos ignífugos directamente al sitio de construcción también permite a los desarrolladores erigir edificios en espacios más pequeños. El edificio 303 Battery recientemente terminado, construido en un lote baldío en el centro de Seattle, sirve como un excelente ejemplo. Al haber entregado acero ignífugo terminado en el sitio, el proyecto mantuvo un área de preparación más pequeña, ahorró tiempo y evitó la necesidad de un taller de recubrimientos en el sitio.
Los proyectos de protección contra incendios fuera del sitio o en taller también han demostrado ser exitosos en estructuras globales icónicas, como “Shard of Glass” de Londres, la Terminal 5 del aeropuerto de Heathrow, y con cientos de obras completadas en las últimas décadas.
Dado que los revestimientos ignífugos son cada vez más duraderos y fáciles de aplicar en entornos fuera de construcción, los aplicadores pueden proporcionar el máximo control para lograr un rendimiento y una estética óptimos para los propietarios de edificios. Este artículo explora siete beneficios clave de la protección contra incendios fuera del sitio, que tiene el potencial de cambiar fundamentalmente la construcción de edificios para mejor.
Ganar eficiencia
La aplicación de revestimientos ignífugos en un entorno controlado fuera del sitio puede acelerar los cronogramas de construcción, lo que lleva a la finalización más temprana del proyecto y un retorno de la inversión más rápido. Con tecnología avanzada aplicación de componentes plurales, los sistemas de recubrimiento intumescente aplicados fuera del sitio requieren menos capas y pueden lograr una gran cantidad de películas húmedas construida en solo una o dos capas. Estos recubrimientos también se secan y curan rápidamente en un entorno de clima controlado, lo que permite un rápido rendimiento en taller.
Ahora bien, existe otra opción de trabajo, es decir, realizar la mayor parte del recubrimiento fuera del sitio, reduciendo significativamente la aplicación requerida en sitio. Por ejemplo, se puede aplicar una imprimación al acero en taller y los puntos de conexión se pueden enmascarar para dejar esas áreas libres de revestimientos ignífugos (figura 3a). Luego, en sitio, los aplicadores pueden simplemente rociar o aplicar con llana manual los recubrimientos ignífugos sobre estas áreas de "retención" para lograr el espesor de película seca (DFT) requerido.
Menor riesgo, mayor seguridad
Generar una programación más precisa del proyecto, es otra de las ventajas que ofrece la aplicación de revestimientos ignífugos fuera del sitio, ya que el proceso no se ve interrumpido por el trabajo de construcción en el sitio. El acero ignífugo se puede entregar en el lugar de trabajo listo para ensamblar, lo que reduce la congestión en obra y promueve la seguridad al tiempo que acelera el cronograma de construcción. Esto da como resultado que se necesiten menos trabajadores y equipos en el sitio, lo que reduce los costos de alquiler y aumenta la productividad.
Otra ventaja, implica la mejora respecto a la seguridad, ya que la pulverización de acero a nivel del suelo en un taller controlado reduce los accidentes y las lesiones potenciales en comparación con la aplicación en obra, desde ascensores, andamios o escaleras. De tal manera que, la reducción de las necesidades de manejo de materiales en el sitio promueve aún más la seguridad. Además, las áreas de preparación pueden reducirse en tamaño, lo que genera menos interrupciones a nivel de la calle.
Más control equivale a una mejor aplicación
Los talleres externos brindan entornos controlados que permiten condiciones óptimas para rociar, curar e inspeccionar, lo que da como resultado una mejor aplicación de protección contra incendios y una mayor eficiencia en la preparación de la superficie. Además, la inspección minuciosa y la medición del acero ya revestido en el entorno de un taller, es más precisa. Los ambientes interiores con iluminación, temperatura y humedad controladas, dan como resultado una formación de película uniforme y un exceso de pulverización reducido.
Varios métodos de protección contra incendios y procedimientos secundarios, incluido el acabado con llana, laminado de acabado, raspado, lijado o esmerilado, se benefician, al no estar sujetos a condiciones impredecibles.
Sustentabilidad superior
Las aplicaciones de protección contra incendios, fuera del sitio, pueden ser más amigables con el medio ambiente en comparación con las aplicaciones en obra. Los Talleres con clima controlado usan ventiladores de escape para reducir las emisiones, evitando la liberación atmosférica de compuestos orgánicos volátiles (COV) en áreas urbanas densamente pobladas.
Adicionalmente, las aplicaciones en el taller permiten el uso de recubrimientos con bajas emisiones de COV, espesores de aplicación reducidos y tiempos de secado rápidos, que son preferibles y reducen el impacto ambiental directo en los aplicadores al mezclar, calentar y rociar los recubrimientos.
Hace irrelevante el clima
Por otro lado, evita complejidades por las condiciones climáticas, ya que, las aplicaciones de campo pueden verse afectadas por un clima impredecible, situación que puede comprometer los programas de rociado y curado en el sitio. Aún más, las inclemencias del tiempo pueden ralentizar un proyecto y mantener a los inspectores alejados de los andamios.
Luce el acero
La aplicación en taller es ideal para recubrimientos intumescentes de película más delgada, que brindan un acabado similar a la pintura y permiten una exposición creativa del acero en diseños que emplean acero estructural expuesto arquitectónicamente (AESS).
Estos revestimientos no solo son estéticamente agradables, también reducen el uso de materiales de construcción. A diferencia de los materiales de protección contra incendios tradicionales, como los materiales resistentes al fuego rociados (SFRM) o la protección contra incendios de cementicios, los revestimientos intumescentes no requieren materiales adicionales para cumplir con los objetivos de diseño y pueden resistir la intemperie. Esto da como resultado edificios más sostenibles con un aspecto más elegante.
Menos reparaciones in situ
El acero protegido contra incendio en taller, también se puede transportar de manera segura a los sitios de construcción, ya que, estos recubrimientos ofrecen protección contra la corrosión y el clima, lo cual, es crucial dada la exposición a temperaturas, humedad y productos químicos variables.
Los recubrimientos intumescentes, en particular los basados en epoxi, son muy duraderos y pueden soportar impactos mecánicos durante el movimiento, el transporte y el montaje. Estos recubrimientos pueden resistir ranuras, abrasiones y golpes entre miembros de acero. Si se produce un daño, a menudo se puede reparar fácilmente aplicando un pequeño lote de recubrimiento en el área afectada. De tal manera que, recubrir estructuras de acero fuera de las instalaciones de construcción es óptimo
Los recubrimientos de alto rendimiento brindan una protección eficaz contra el fuego y la corrosión para el acero estructural en muchos tipos de edificios, como estructuras residenciales, comerciales e industriales.
Con una aplicación adecuada, estos recubrimientos generalmente requieren un mantenimiento mínimo durante toda la vida útil de una estructura. Al optar por recubrir el acero con intumescentes fuera del sitio, en un taller de aplicaciones, los gerentes de construcción pueden lograr aplicaciones de revestimiento más precisas y duraderas, lo que genera numerosos beneficios, incluida una mejor calidad, eficiencia y rentabilidad.
